La bonificación no podrá ser menor al 20% del precio pagado. El pago de esta se hará sin afectar la indemnización que en su caso corresponda por daños y perjuicios. Para determinar el pago de daños y perjuicios la autoridad tomará en cuenta el pago de la bonificación que se hubiese hecho.
Se podrá exigir directamente al proveedor presentando su comprobante o recibo de pago (Art. 92 Ter de la Ley Federal de Protección al Consumidor).